
Intergaláctico: el profeta hereje está listo para ofrecer a los jugadores una experiencia notablemente diferente en comparación con los proyectos pasados del estudio, prometiendo un mayor nivel de libertad inspirado en personas como Elden Ring. Los desarrolladores tienen como objetivo introducir una mecánica de exploración del mundo abierto, marcando un cambio significativo de sus diseños de juegos lineales anteriores.
Según el periodista Ben Hanson, el juego se encuentra en un vasto planeta individual donde los jugadores profundizarán en los misterios de una civilización perdida y explorarán una nueva religión floreciente, que desempeñará un papel central en la narrativa. Si bien queda por ver la implementación exacta del concepto de mundo abierto, está claro que el estudio se está expandiendo en un nuevo territorio.
El profeta hereje marca la primera aventura del estudio en una experiencia de jugador en solitario, donde los jugadores navegarán por el mundo del juego sin compañeros o aliados. Como explica Neil Druckmann, el objetivo es evocar un profundo sentido de soledad dentro de un universo desconocido, al tiempo que explora temas profundos de fe y religión. La historia se desarrolla en el planeta Sempiria, aislada del resto de la galaxia durante más de 600 años, donde el cazador de recompensas Jordan Moon llega a una misión.
Druckmann también compartió que el desarrollo de intergaláctico: el profeta hereje se inspiró en clásicos como Half-Life 2 y Monkey Island. Esta influencia sugiere un alejamiento de la guía convencional hacia un estilo narrativo que desafía a los jugadores a reconstruir la historia mismos.
Anunciado en los Game Awards 2024, el juego todavía espera una fecha de lanzamiento, dejando a los fanáticos que anticipan con entusiasmo más detalles sobre este ambicioso nuevo proyecto.