Los cierres silenciosos de tiendas de GameStop generan preocupación
GameStop está cerrando silenciosamente numerosas tiendas en EE. UU., dejando a clientes y empleados tambaleándose. Los cierres, a menudo anunciados con poca o ninguna advertencia, representan una caída significativa para el minorista de videojuegos que alguna vez fue dominante. Si bien GameStop no ha reconocido públicamente una iniciativa de cierre generalizada, las plataformas de redes sociales están repletas de informes tanto de clientes como de empleados que detallan ubicaciones cerradas recientemente o que pronto cerrarán.
Esta desaceleración refleja una tendencia más amplia. La presencia física de GameStop, que alguna vez contó con más de 6.000 tiendas en todo el mundo y 9.000 millones de dólares en ventas anuales (en 2015), se ha reducido drásticamente. Según ScrapeHero, la compañía ha perdido casi un tercio de sus tiendas en los últimos nueve años, y en febrero de 2024 quedaban aproximadamente 3000 en los EE. UU. Esta disminución se atribuye en gran medida al cambio hacia las ventas de juegos digitales.
Tras una presentación ante la SEC de diciembre de 2024 que insinuaba nuevos cierres de tiendas, ha llegado evidencia anecdótica de clientes y empleados en plataformas como Twitter y Reddit. Muchos expresan su decepción, destacando la pérdida de opciones convenientes y asequibles para juegos y consolas. Las cuentas de los empleados también muestran un panorama de luchas internas, con informes de objetivos de desempeño exigentes a medida que la gerencia decide qué ubicaciones retener.
El continuo declive de GameStop
Los cierres recientes son solo el último capítulo de la lucha actual de GameStop. Un informe de Reuters de marzo de 2024 pintó un panorama sombrío, citando una caída de ingresos del 20 % (432 millones de dólares) en el cuarto trimestre de 2023 en comparación con el mismo período de 2022 y el cierre de 287 tiendas el año anterior.
A lo largo de los años, GameStop ha intentado varias estrategias para combatir su base de clientes en declive, incluida la expansión a mercancías, intercambios de teléfonos e incluso calificación de tarjetas coleccionables. La empresa también se benefició de un aumento del interés de los inversores aficionados en 2021, un fenómeno documentado en el documental de Netflix Eat the Rich: The GameStop Saga y la película Dumb Money. Sin embargo, estos esfuerzos no han sido suficientes para detener la ola de cierres de tiendas y el declive general de la empresa.